Empezamos Sexto Continente con dos recomendaciones: Jesús Salviejo nos recomienda la lectura de una novela de la gallega Blanca Riestra, “La noche sucks”. Una noche en Alburquerque, dos gemelos juegan con armas en el garaje… En Alianza. Raquel Lanseros, nos propone un libro de poesía, “Sobre la grama” de la nicaragüense Gioconda Belli. Poesía amorosa en Navona.
Verónica Vicente, de Capitán Swing, nos propone la lectura del libro “Las campanas del viejo Tokio” de Anna Sherman. Desde 1632 hasta 1854, los gobernantes de Japón restringieron el contacto con el extranjero, un casi aislamiento que fomentó una cultura notable y única que perdura hasta nuestros días. Durante su periodo de aislamiento, los habitantes de la ciudad de Edo, más tarde conocida como Tokio, confiaban en sus campanas públicas para dar la hora. En su libro, Anna Sherman relata su búsqueda de las campanas de Edo, explorando la ciudad de Tokio
Eloy Tizón nos propone un libro de cuentos: “La isla de los conejos” de Elvira Navarro, en Radom House. Un falso inventor lleva conejos a una isla para que acaben con los nidos de unos pájaros cuyo nombre nadie sabe.
Jon Viar nos incita a leer una obra teatral de Antonio Buero Vallejo, “La detonación”. Dos hilos temáticos paralelos guían la obra en perfecta simbiosis: la vida de Larra y los borrascosos acontecimientos políticos que acaecen entre los años 1826 y 1837.
Y pasamos a temática de violencia familiar e incluso el deseo de matar al padre.
Seguimos con una novela de Eugenia Kléber. Encontraremos en “Aquí hubo siempre mucho amor” diecinueve cuentos, historias —momentos— de fragilidad y turbulencia emocional, de irrealidad y misterio, algunas de las cuales juegan con duras vivencias personales de la autora. Violencia en el entorno cercano, familiar, sentimental.
Y para acabar, hablamos con Miguel Ángel Oeste de su nueva novela “Vengo de ese miedo”. En Tusquets. Se ha dicho de esta novela que es “Un relato devastador sobre el maltrato en la familia, que también es un doloroso retrato sociológico”. Incapaz de visitar a su padre, el narrador de esta historia decide escribir sobre su familia sin contar con ese testimonio. El miedo a estar junto a él lo paraliza. Y así, como una infección que lo invade todo, aflora la narración de este infierno. Pero según lees compruebas que es también una meditación sobre el poder de la escritura.
Un saludo de Miguel Ángel de Rus en nombre de todo el equipo de Sexto Continente. Abrid las mentes, despegamos.